miércoles, 13 de octubre de 2010

Te necesito

La distancia duele, pero en el fondo nada cambia
Refuerza mi determinación ante lo adverso
Y si para ver el guión de esta historia hay que mirar en el reverso
Yo hace tiempo que lo sé, en realidad no me hace falta

En cambio a ti te necesito como al agua, como al aire
Como el alimento y la bebida que reconforta al caminante
Como elixir milagroso que me cura todo mal
Como palabra que aporta la rima al verso final

Somos la tinta el bolígrafo que esccribirá este cuento
Un cuento sin final, un cuento en blanco por dentro
Pasemos juntos la hojas de este relato singular
Somos los protagonista, actriz y actor principal

Dejame ser el compañero fiel que acompaña a la heroína
se mi droga, mi adicción, mi enfermedad y medicina
Dejame ser la sangre que bombea tu corazón
Se mi latido, se mi arritmia, mi ahogo y mi respiración

Más allá de cualquier número, de lo cuantificable
Más allá de lo físico, más allá de lo expresable
Te espero aqui y allí siempre con el pecho roto
Donde el infinito se queda corto, donde la eternidad sabe a poco

miércoles, 14 de abril de 2010

Especie aparte

Son una especie aparte. Otra raza. Otra subcultura.
Nuestros carceleros diarios con el propósito de liberar y ampliar nuestra visión del mundo.
Temidos y odiados. Nos gritan, nos empujan al abismo del saber. Apuñalan el vientre de nuestra ignorancia. Hacen rebosar el cáliz de nuestra memoria con complicados postulados, formulas, teoremas y definiciones. Cada día los vemos llegar con presagios de hastío y enclaustramiento. Valerosos actores que representan su papel ante un público a veces poco conciliador.
Respetados y amados. Son capaces de ser cercanos. Nos dedican horas interminables de su vida, traspasando sus conocimientos a mentes carentes de ánimo alguno ante la tarea impuesta. Miran los rostros de sus pupilos y han de sobreponerse pues, como tantos otros, tienen que comer. No creen en un mejor pago que vernos convertidos en hombres y mujeres que algún día llegaran a ser alguien.
Platón los llamaría prostitutas del saber.
Creo que el resto del mundo los llama… ¿cómo era? ¡Profesores!
Algunos por vocación y otros por obligación cumplen el mismo propósito. Semana tras semana se arman de valor y se plantan ante quizás 20 o 30 alumnos gritones, groseros, preguntones, brillantes, irrespetuosos, salvajes, inteligentes, educados. Semana tras semana vencen su abulia y vuelven al trabajo.
Se les debe reconocer el merito.
Porque aunque a veces son un poco cabrones, desgraciados, pesados, locos, irreverentes, locuaces, aburridos; siguen siendo personas, siguen estando ahí todos los días, siguen apostando por nosotros: el futuro.
Joder. Hay que admitir que se lo curran…
P.S: Dedicado a todo aquel que se dé por aludido… Tú ya sabes quién eres, Don Aludido…Jajaja.

martes, 6 de abril de 2010

Contradicciones

En la mesa, mientras se come, alguien cuenta algo que para todos debería ser natural pero que todos consideramos una “guarrada”. Y alguna persona se molesta. Y alguna persona dice, -Tío, ¡que estamos comiendo!-.
Al día siguiente, en la mesa, mientras se come, alguien cuenta algo que para todos debería ser natural pero que todos consideramos una “guarrada”. Y es entonces cuando te das cuenta de que ese alguien que está contando esa “guarrada” es la que el día anterior se había molestado. O la que había puesto cara de asco. O aquella que había dicho, -Tío, ¡que estamos comiendo!-.
Hay muchas cosas a tener en cuenta cuando se intenta comprender la esencia que nos hace humanos.
Creo que una parte de dicha esencia son nuestras contradicciones.

Por pecador Dios te castiga. Por su cualidad de misericordioso Dios te perdona.
Pero entonces… ¿me castiga o me perdona?

Alguien, mientras mira la televisión, (las noticias que hablan sobre disturbios entre los hooligans, o hablan sobre esas señoras que lloran mirando a una virgen de cerámica, o hablan sobre terrorismo islámico), ese alguien te dice, -Tío, nunca he entendido esa clase de fanatismo estúpido. Es patético…-.
Al día siguiente ese alguien es arrestado por comenzar una pelea y mandar al hospital a una persona que no compartía sus ideas políticas…

Alguien, mientras te revientas un grano frente al espejo, te ve y exclama, -¡Que asco!!-.
Al día siguiente ese alguien se ofrece gozosa como voluntaria para reventarle los granos de la espalda a su novio…

Alguien ve a una pareja de homosexuales pasear tranquilamente agarrados de la mano, y ese alguien dice, -¡Que ordinario y antinatural! ¡Que asco!-.
Al día siguiente ese alguien se descarga a su ordenador el porno mas escatológico que puede encontrar en la red…

¿Qué cómo definiría yo esta actitud, este... comportamiento?
¡Humano!

Recuerdos

Una noche cualquiera.
Estas rodeado de gente, quizás familiares, quizás amigos.
Y entonces alguien se pone a contar anécdotas tuyas. Cosas que hiciste cuando eras pequeño. Aquellas travesuras. Aquellas bromas. Aquellos momentos sobre ti que quedaron grabados en la mente del quizás familiar, quizás amigo.
Alguien se pone a recordar.
Recuerdos.
Te suelen provocar sentimientos contradictorios. Porque a veces te traen de tu memoria recuerdos que hubieras preferido olvidar. Cosas que te hacen pensar acerca de la felicidad en tu infancia, tu adolescencia.
Y entonces alguien logra arrancarte una sonrisa. Rememorando aquella vez que le diste en la cara a una compañera de clase con una cascara de plátano. O aquella vez que estando de compras te fuiste a casa, y todos te buscaban, y tú, con 5 añitos, ya estabas echado en la cama.
En ocasiones logras darte cuenta de que las cosas que te marcan, los sucesos que mejor puedes evocar, son los malos.
Pero las cosas que marcan a la gente cercana, los sucesos que mejor pueden evocar, en su mayoría son buenos. En su mayoría.
Quizás lo que deberíamos hacer para recordar debería ser rodearnos una noche de nuestros seres queridos, y dejar que fluya.
Quizás a lo único que aspira el ser humano no es a vivir bien o tener muchos amigos, si no a dejar huella de nuestro paso.
Ser recordados.
Quizás por mucha gente, quizás por un par de personas. Quizás para bien, quizás para mal. Pero al fin y al cabo:
Ser recordados.
¿Seré capaz?

lunes, 8 de febrero de 2010

Personalidad anal.

Mi forma de nombrarlo es “Universos Paralelos”. Diferentes porciones de realidad que ocurren en un mismo tiempo. Diferentes percepciones e interacciones con el medio que tiene lugar en una misma franja horaria. Normalmente, a eso que yo llamo universos paralelos, se les suele llamar .
Vidas las hay de muchos tipos y todas dependen del punto de vista desde el cual se miren. Las hay plenas, aburridas, duras, fáciles, pobres, millonarias… Y todas tienen algo en común: que todas son diferentes. Como una huella dactilar. Es propia de cada persona. Como la estructura del ADN. Cada una se desarrolla de un modo distinto. Las proteínas, al igual que las vivencias, se organizan para dar como resultado a cada uno de los entes que habitan la superficie terrestre.
Por lo menos que nosotros sepamos.
Y paralelo al desarrollo de las vidas, o mejor dicho, ligado a dicho desarrollo, hay un factor, ni mucho menos pequeño en importancia pues incluso a veces, como el agua sobre la luz, como un muro sobre el agua, como una maza sobre el muro; desvía, cambia o encauza para bien o para mal el desarrollo de las vidas, y esto es: el derecho a cuestionarlas.
Ese derecho que nos da el libre albedrio. Ese libre albedrio que nos dio Dios. Ese Dios que nos dio la Iglesia. Esa Iglesia que nos dio la humanidad. Esa humanidad que posee libre albedrio, ese libre albedrio que nos dio… ¡Pero un momento! He aquí la pescadilla que se muerde la cola. Porque todo gira no en torno a Dios, si no en torno a nosotros y nuestro libre albedrio. En torno a nuestro libre albedrio y nuestras vidas.
Nuestras vidas. Esas que son cuestionadas por el libe albedrio, por otras vidas. Un derecho inalienable que no lo debería ser tanto. Porque a cada paso nos hace inferiores, o superiores. Porque cada día nos hace merecedores del perdón de Dios o merecedores del castigo eterno.
Vidas.
Son nuestras. Nosotros elegimos como vivirlas. Ese si debería ser un derecho inalienable. Derecho a dirigir nuestro propio destino y ser dueños de criticarnos a nosotros mismos por lo que pensamos, por lo que hacemos y decimos.
Pero no.
Porque prevalece el derecho a criticar y estudiar hasta el último átomo vidas ajenas. A desgajar y devorar el pensamiento del vecino.
A destruir.
No es justo. Que venga otra persona y diga:
-Que no valemos nada.
-Que no llegaremos a nada.
-Que así como somos nos quedaremos solos.
-Que eres raro.
-Pero que vives mejor que los niños africanos.
-Que por lo menos estas sano.
Y es entonces cuando yo me pregunto:
¿Acaso esa persona es feliz viviendo como vive?
¿Acaso vive de acuerdo a lo que piensa?
Y por ultimo:
¿Quién es para cuestionarnos antes de cuestionarse?
Es más.
¿Quién demonios es?
Ya no existe la vida privada. Existe la privación de la vida.
Debería haber una ley que en vez de multarnos por escupir o correr por la calle, multara a los que critican sin criticarse primero. Que no aceptan al resto porque no se aceptan a si mismos. Esa gente amargada que lo único que busca es amargar a otra gente para sentirse bien, para equilibrar la balanza a su favor.
Unos lo llaman libre albedrio. Yo lo llamo soberana putada eterna. Porque unos practican el criticar al prójimo, y creo que habría que practicar mas la preautocritica-postreflexiva.
Lo mejor de todo, es que hay días en los que yo no la practico. Hay días en los que no me libraría de la multa.

viernes, 15 de enero de 2010

Una fuerte presión

Sientes una fuerte presión
Es incontenible
No sabes a q que se debe pero tienes la certeza absoluta
De que si no haces algo al respecto sufrirás
Y sufrirás mucho
Es algo profundo
Un cumulo de sensaciones que se agolpan contra tus pensamientos
Que no te dejan razonar
Que ponen en alerta tus instintos más básicos
Que oprimen tus neuronas poniéndolas en acción

Y buscas la forma de aliviar tu pesar
Buscas un modo de hacer que ese dolor desaparezca
Buscas la manera de sentirte mejor
Buscas y buscas, ávido, desesperado

Y encuentras tu salvación
Te recorre una corriente eléctrica de arriba abajo
Todos tus músculos se contraen para luego relajarse
Todo tu ser sufre un espasmo para luego sumirse en el limbo más absoluto
Te dejas caer sobre un colchón de algodón que te acoge casi con amor
Todos tus problemas son vanas nimiedades por un momento
Durante unos segundos tu mente es capaz de olvidarse de todo solo para disfrutar por completo de esa sensación
El éxtasis
El nirvana
La iluminación

¿Que si estoy ablando de expresar algo profundo? ¿O de hacer al amor?
En absoluto
Estoy ablando de ir a cagar cuando tienes muchas ganas
Y dicen que si lo haces fumando es aun mejor
Todavía no lo he probado...

Drástico cambio

Es un cambio drástico
Porque estabas bien allí donde estabas
Creías no necesitar nada más
Porque había calidez en tu ser mientras te encontrabas en ese lugar

Pero estas obligado a irte
Sabes que no puedes estar allí por mucho tiempo
Que no puedes soportar demasiado lo que ello conlleva
Que aunque tu sangre se hiele de solo pensarlo
Tienes que vivir
Tienes que seguir adelante

Así que tienes que mentalizarte
Tienes que asumir tu situación
Asumir las consecuencias de salir
Asumir que no estarás cómodo allá adonde vas
Que te sentirás desnudo
Que sentirás el frio
Que no abra nadie mas que tu y tendrás que valerte tu solo
Que nadie estará ay para animarte
Para darte su calor

Es un cambio muy drástico

¿Que si estoy ablando de emigrar, de salir de tu país? ¿O de salir de tu ciudad natal?
En absoluto
Estoy ablando de salir de la ducha en pleno invierno
Y es muy jodido si no tienes calefacción en casa...

Ella

Vivimos en un mundo de hipocresía.
En los negocios, en al política, en las amistades y en la famila.
Todo es hipocresía.

Caminando entre la gente casi todo son rostros serios, cabreaodos, tristes, cansados, pero los rostros felices son los menos.
Y lo más seguro es que de entre todos esos rostros serios, cabreados, habrá un vendedor de coches el cual, cuando vayas a preguntarle por el nuevo Mitsubishi Outlander
te ofrecerá su mejor sonrisa, pondrá voz pedante y te hará toda la pelota que pueda,
aunque por dentro piense que eres feo, un palurdo, que no tienes dinero y que le estas haciendo perder el tiempo,
y que además su mujer no le hizo bien el amor anoche y tiene ganas de partirle la cara a alguien.
A ti, por ejemplo.

Eso es hipocresía. Yo la practico, tú la practicas, ellos la practican y todos la practicaremos por el resto de los días.
Porque ya es algo inconsciente, involuntario. Ya no es algo que podamos controlar.
Ya pertenece al género y actitud humanos.
De hecho creo que hay una región del cerebro que lo controla.
El... ¿hipotálamo quizás? ¿O el hipocampo?
Es igual. Sigue estando ahí. Consumiéndonos, controlándonos.
Hipocresía.

De tanto repetir esa palabra va a acabar perdiendo todo su significado para mí.
Mejor la llamaré <>. Ella la Diosa, ella la omnipotente, ella la omnipresente.
Simplemente ella.
No podemos escapar a su control.

Y en el lado opuesto, como anti-dios, el diablo o el anti-cristo, ángel caído; la sinceridad.
Pero no la sinceridad a medias tintas, sino esa sinceridad suprema que cuando miras a los ojos de quien la ejerce,
reconoces en ellos el abismo mismo a los infiernos o quizás las escaleras mismas al cielo.
Esa sinceridad que se está perdiendo, que está en decadencia, que está cayendo en el olvido.
De hecho se podría decir que está mal vista.
Porque hoy día, cuando miras a alguien a los ojos y le dices de corazón que te parece gordo, feo, ignorante o demás cualificativos similares,
se ofende, porque estas siendo demasiado sincero, porque en realidad lo que quiere es un poco de hipocresía.
Sí, esa hipocresía que te controla para que al final le digas que no, que está en su línea, que no se martirice porque no es feo y que máquina por eso que me cuentas porque "yo no lo sabía".

Nos domina, nos controla, pero la amamos incondicionalmente.
Sufrimos una especie de Síndrome de Estocolmo.

Y yo estoy aquí, pensando sobre todo esto.
Porque quizás todo esto es culpa de la sociedad, de las culturas o quizás es culpa del propio ser humano.

He llegado a pensar en irme a vivir de ermitaño.
Pero sé que no voy a ser capaz.
Porque si he dicho lo que he dicho, si he proyectado todo este odio contra ella, es porque en realidad la amo, incondicionalmente.

Por eso cuando venga algún amigo y me pregunte que por qué estoy tan pensativo, tan serio, le ofreceré mi mejor sonrisa,
y le diré que pensaba en lo feo, gordo e ignorante que es.
¡NO!
Mejor le diré que qué bien que haya aparecido por aquí,
porque me cae de puta madre.

miércoles, 13 de enero de 2010

A nadie en particular

Yo si creo en un dios, y ese dios se llama amor
Pero es un dios interno, un dios que habita en mi interior
También hace milagros, también desoye mis ruegos
También sigo sus preceptos, también le sigo su juego

Corre por dentro de mis venas, a alguien salpicará
Cuando el puñal de cupido consiga desgarrarme el vientre
Fluidos de pasión y anhelo es lo que mi corazón siente
Pero ese cuando aún no llega, mi ser paciente esperará

Correspondencia pido, para este loco amor reciprocidad
No compasión, no pena. Un poco comprensión quizás
Porque grito y nadie me oye, porque llamo y nadie responde
Sigo buscando a esa deidad, si sabes en que lugar se encuentra dime donde

¿Dónde estás tu mi amor? ¿Dónde estás?
¿En qué lugar tu ser se esconde?
¿Ante mí algún día aparición harás?
¿Mi interior por fin derramarás?
¿Beberás, saciarás tu sed de sangre?
¿Descargar esta pila de pasión conseguirás?

Respuesta a estas preguntas necesito, necesito saber que puedes ser real
Que puedes llegar a sentir lo que yo siento, que puedes iluminar mi oscuridad

Pero esta carta no va dirigida a nadie, por lo menos no en particular
Y paciente espero, paciente. Espero tu llegada o tu regreso
Espero conesta angustia por dentro que imposible es a nada igualar
A que vengas al igual que yo a amar, a sentir, a sellar nuestros labios con un beso

miércoles, 6 de enero de 2010

Sensaciones

Hay días en los que solo quiero ver la oscuridad

Esos días en los que solo quiero escuchar el silencio

Aquellos en los que me basta la compañía de la soledad

Y en los que las penas se ahogan bajo el culo de dos tercios

Hay días que quiero huir lo más lejos posible de este mundo

Que no atiende a razones, que no entiende de pasiones

Que a veces te hace sentir tan aislado, tan vagabundo

Porque no ay atisbo de compresión a tus motivaciones

Y luego dicen, que eres raro, o incluso depresivo

Cuando intentas hacerte entender por encima de este ruido

Pero es una batalla que hace ya tiempo he perdido

Porque a día de hoy todavía nadie me ha comprendido

¿Que si soy un deprimido? Nada más lejos de lo cierto

Pues en mi ser hay severa antítesis de sentimientos

Amo a la vida por bella y la odio por cruel

Pero en contemplarla y apreciarla encuentro mi fuel

Cada brisa, cada hoja, cada amanecer y sus matices

Me bastan para curar de mi mente cicatrices

Reconfortan mi alma las sensaciones más mundanas

Conjuntos de percepciones que mi conciencia desgrana

Difícil explicación mis pensamientos tienen

Al igual que mi actitud ante el mundo y la vida

A la cual paz y tranquilidad le es exigida

Y contesta con disparos de dolor en las sienes

Un pedazo de mí en cada letra me gusta dejar

Un atisbo de mi interior, habitado por extraño inquilino

Para en unos cuantos versos claro tal que agua dejar

Que rozar lo intangible, que lo invisible vislumbrar,

Que sentir lo insensible, que lo inalcanzable alcanzar

Es mi única vía, es mi razón locura, es mi intención destino